En los más de 110 años de historia de la marca de lujo de General Motors no había existido un automóvil tan poderoso como el Cadillac CTS-V 2016. Este título lo ha obtenido al registrar una potencia de 640 hp y 630 libras-pie de torque, mismos que le permiten lograr una velocidad máxima de 200 mph (321 km/h). Con estas cifras logra superar al BMW M5 y al Mercedes-Benz E63 AMG con 560 y 577 hp respectivamente.
Sin embargo al comparar las cifras de aceleración, el Clase E con sello AMG es mucho más eficaz con dos décimas de segundo que este CTS-V 2016 al hacer recorrer el velocímetro de 0 a 60 mph (96 km/h) de manera explosiva. Mientras que el Cadillac detiene el cronómetro en 3.7 segundos, el Mercedes-Benz lo hace en 3.5 segundos, por su parte el M5 queda en tercer lugar con 4.2 segundos.
Para lograr esta gallardía, Cadillac CTS-V 2016 se hace valer de un nuevo V8 de 6.2 litros supercargado y una transmisión automática de ocho velocidades. Complementa este trabajo el launch control, el diferencial electrónico de deslizamiento limitado y el Performance Algorithm Shifting, el cual monitorea el comportamiento de la caja y el conductor y de esta forma hacer los cambios más precisos.
Cada uno de los 640 hp se hacen acompañar de una serie de elementos que permiten una mejor aerodinámica y ventilación. Dentro de esta lista destaca el cofre de fibra de carbono con entrada de aire, fascias más robustas y con entradas de aire más grandes, splitter delantero, faldones laterales, así como un spoiler y difusor trasero. Donde también hubo cambios para contener el poder del V8 fue en el sistema de frenos, en esta ocasión los frenos Brembo son de gran tamaño para mejorar el rendimiento y la durabilidad.
Cadillac CTS-V 2016 obtiene una dinámica de conducción deportiva con el sistema de suspensión Magnetic Ride Control con una labor 40 por ciento más rápida. Asimismo frente la rigidez estructural aumentó en un 25 por ciento para mejorar el balance del auto.
Este CTS puede pasar de la agresividad en la pista a un confort relajado de manera vertiginosa gracias a que se puede elegir entre modos de conducción -Tour, Sport, Track y Snow- que modifican el comportamiento del vehículo.
En el interior todo este alto desempeño se hace presente en la cabina de este Cadillac CTS-V 2016. Fibra de carbono, cuero y ante son los materiales que más destacan en este ambiente racing que es ornamentado con asientos Recaro, un volante y palanca de cambios deportivos.
También equipa CUE con conectividad Bluetooth, sistema de navegación con audio Bose Surround Sound, cargador inalámbrico de teléfonos, conectividad OnStar 4G LTE con función de conexión Wi-Fi hotspot y el Performance Data Recorder que permite a los conductores obtener datos del desempeño, además de grabar en vídeo de alta definición sus experiencias de manejo.