Basado en la versión de techo fijo, la cual logró desde su lanzamiento hace dos años 180,000 unidades vendidas, el DS3 Cabrio mantiene las medidas originales pero con la posibilidad de una experiencia a cielo abierto.
Una de sus principales características es que gracias a su diseño “cabrio-coach”, (semidescapotable) las puertas y los arcos del techo permanecen intactos, salvaguardando gran parte de la resistencia estructural del vehículo. Al respecto, Citroën detalla que necesitó apenas 25 kg extra para reforzar la carrocería del vehículo.
Su techo de tela consta de tres opciones de color: negro, azul y el llamativo diseño “DS Monogramme”, además de la posibilidad de personalizar sus bordes con la opción de elegir entre diez colores diferentes. Una función destacable en esta capota es que toma apenas 16 segundos en abrirse, además de poder hacerlo a velocidades de hasta 120 Km/h. Sus opciones de abertura varían entre intermedio, horizontal (sólo el techo) y abertura total.
Los ingenieros franceses consideraron los problemas aerodinámicos que acarrean los descapotables con la incorporación de un deflector frontal que se activa cuando el techo se abre. Además aseguran que con la capota cerrada, el aislamiento del sonido externo es el mismo que en la versión de techo fijo.