Si bien hoy en día los diodos luminosos mejor conocidos como LEDs se utilizan en prácticamente todos los ámbitos de la vida, es en el sector automotor donde podemos aprovechar más las cualidades y propiedades de este tipo de iluminación.
Debido a que su costo aun es más elevado que las luces de xenón o halógeno, aun no es utilizado de serie por todos los fabricantes, sin embargo, la cantidad de compañías que en la actualidad emplean esta tecnología es mayor que hace algunos años, además de que ya no es exclusiva de los automóviles de lujo.
Independientemente de los desarrollos e innovaciones que han hecho los fabricantes de automóviles, la industria de los LEDs comprende diferentes tipos y formas. Dependiendo del ámbito de aplicación, pueden ser diferenciados por su estructura, potencia y vida útil.
Para tener una idea de la variedad de LEDs que existen, a continuación, presentamos los más importantes y por ende los más populares:
LEDs de alambre
Este tipo catalogado como el precursor de los LEDS sirve principalmente para funciones de control. En combinación con más LEDs, se utilizan como Spots de LED, tubos fluorescentes de LED, módulos de LED o tubos de LED. Se pueden adquirir en tamaños de 3,5 y 10 mm. El cátodo, que es el polo negativo de un LED de alambre, se reconoce por el hecho de ser más corto que el ánodo (polo positivo) y por un recubrimiento más plano. Asimismo, el ángulo de salida de la luz se ve definido por la forma de la lente de la carcasa.
SuperFlux
Son más potentes que los LEDs de alambre y disponen de hasta cuatro chips (cristales semiconductores). Estos modelos se caracterizan por un gran ángulo de irradiación y se utilizan principalmente en el ámbito de la iluminación de superficies, ya que la luz se emite sobre toda la superficie. Los cuatro contactos se encargan de desviar el calor y pueden controlarse de manera individual. La estructura del High Flux garantiza una larga vida útil y lo convierte en una fuente luminosa muy eficaz que, además, tiene una aplicación universal.
SMD
Este tipo de LED que toma las iniciales “Surface Mounted Device” están compuestos de tres o cuatro chips y disponen de contactos que se unen al correspondiente circuito impreso o a las superficies de contacto. Son bastante insensibles en relación a su densidad de corriente y, por ello, pueden iluminar de manera muy intensa. Las versiones de los LEDs SMD son muy diversas. El tamaño, la forma de la carcasa y la intensidad luminosa pueden seleccionarse dentro de una gran variedad. En combinación con otros diodos luminosos SMD, se utilizan en los tubos fluorescentes LED y en los módulos LED. En la industria automovilística se utilizan principalmente para la luz intermitente, de freno y de conducción diurna.
High Power
Son unos diodos luminosos muy potentes y resistentes que, en condiciones óptimas de funcionamiento, pueden trabajar con corrientes de 1,000 mA. Se utilizan especialmente en los circuitos impresos con núcleo de metal. Su extraordinaria estructura necesita de las más estrictas exigencias del termocontrol.
COB
El LED “Chip On Board” (COB - Chip a Bordo) es el diodo luminoso más desarrollado de todos. Lleva este nombre porque va fijado directamente a la placa de circuitos impresos. Se realiza por medio de una “unión”, en la que los chips se fijan de manera totalmente automática a la placa dorada. El contacto al polo contrario se realiza a través de un alambre de oro o de aluminio. Debido a que en los LEDs COB no se utilizan reflectores ni ópticas de lente, el ángulo de irradiación de la luz que ilumina es muy amplio. Las mayores ventajas de la tecnología COB residen en su excelente potencia luminosa y en su iluminación homogénea, así como en su amplio ámbito de aplicaciones.